miércoles, 3 de agosto de 2011

Recolección de moras

En total fueron dos kilos, y lo bien que lo pasé pesa más que lo que me va a engordar la confitura que voy a hacer con ellas. Nunca me gustaron, pero la verdad es que su olor me encanta y el preparado que hago con ellas también. Ir a coger moras me resulta de lo más entretenido, al principio veo las más grandes en lugares inalcanzables, pero a medida que avanzo, las encuentro al alcance de mi mano, colocadas como en racimo al final de ramitas que descansan sobre cualquier arbusto, haciendo que su recolección sea tan fácil que el recipiente más grande siempre queda pequeño.